Muchos son los llamamientos posibles en una situación como la actual, pero no se me ocurre ninguno más idónea que el llamamiento a la unidad interna. Unámonos!!!
La circunstancia nos obliga a estar a la altura, dejando a un lado las fricciones.
En este EGI Eguna, me gustaría trasmitiros 3 ideas:
La primera, qué el momento histórico excepcional que se vive trasciende a intereses partidistas y, mucho más a diferencias internas. Tras celebrar el alto el fuego, debemos contener la respiración y seguir esforzándonos hasta que eche a andar el proceso de pacificación. Haciendo el camino entre todos y sin exclusiones, estaremos orgullosos de contribuir a liberar nuestro país de sus cadenas. Después, vendrá el proceso de normalización política, que terminará por enterrar la violencia. Y ahí, EGI también debe aportar su granito de arena. Como dijo el Lehendakari en su visita a la Moncloa el pasado miércoles, “el protagonismo corresponde al Pueblo Vasco”; y como partido mayoritario de este Pueblo, debemos ser agentes activos en la búsqueda por la paz.
En segundo lugar tenemos que fomentar nuestra apuesta por la paz integrando y dialogando con aquellos que quieren hacer política y todavía no pueden. Garantizando la supervivencia de nuestra cultura y de nuestros rasgos como pueblo, asentando nuestro lugar en una Europa de incierto futuro político. Hay que afianzar la paz para poder acometer el proceso de autodeterminación, cuyo ámbito de decisión debe ser el conjunto de Euskal Herria. La decisión que corresponde a los propios vascos deberá ser aceptada por los gobiernos español y francés si quieren una solución definitiva al conflicto político.
Tercera idea. El papel de EGI es especialmente ilusionante porque la situación política nos permite mantener un pulso con Segi para liderar a la juventud vasca hacia un compromiso con nuestra nación. La defensa de la identidad euskalduna en un horizonte de paz requiere de la participación del partido que aglutinó a los precursores de la cultura vasca en muy diversas épocas. Todos deberíamos tomar parte en el proceso. No olvidemos que no luchamos por la gloria ni las riquezas sino por nuestro Pueblo. Y EGI no puede quedarse a modo de comparsa en un momento tan decisivo en la historia de nuestro país.
Por lo tanto, insisto
.Adecuación a la nueva situación con unidad interna y esfuerzo para ser agentes activos de paz.
.Dialogo sin exclusiones y defensa de nuestra identidad para poder consolidar la paz y afrontar la autodeterminación.
.Apuesta por qué EGI lidere a la juventud vasca hacia un compromiso con su nación.